sábado, 16 de junio de 2012

SOBREMURIENDO

Como si de pronto todo
dejara de pertenecerme:
Era dueño del mundo
y me desalojaron,
     de las cosas
y me embargaron,
     de la gente
y me expulsaron.

Tuve necesidad de ser
     y me borraron,
quise salir de mí
    y me metieron,
estuve por morir
   y me salvaron,
quise vivir
   y me mataron.

Religioso por mandato divino
y hereje por sentido propio,
sacerdote y brujo al mismo tiempo,
dueño de la liturgia y de los mitos.

Adúltero fiel,
peregrino estático en su ermita,
mudo y charlatán,
testimonial farsante,
suicida vividor,
único sobreviviente de mis sueños.

Viviendo por morir,
muriendo vivo,
quiero sobrevivir
      hasta en la muerte
y quiero sobremorir
     toda la vida.

Rectifico:
el mundo era mi dueño
y me mudé,
regalé las cosas
por tiranas,
me alejé de la gente
por quererme…


Autor: Ernesto (de “Sin etiquetar”)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Nada más acertado acerca de nuestra naturaleza humana.... Excelente.

Lonicera dijo...

Ernesto - me gustan mucho sus poemas, en particular el juego de palabras en esta la más reciente.

Pero también le debo muchas disculpas como el papá de Mechi: no sé por qué, pero los comentarios de mi blog castellano Dulcinea no me llegan al mail, y hacía rato que no me fijaba en el blog mismo.

Le agradezco mucho que se haya tomado el trabajo de dejarme un comentario tan lindo, y le aseguro que el blog no está para nada abandonado. Admito que hace rato que no escribo entradas, pero es por falta de tiempo (por mi trabajo) y porque trato de subir algo a Lonicera (en inglés) semanalmente - como si fuera una revista. No me di cuenta cuánto tiempo me llevaría hacer esto...

Quiero decirle también que admiro mucho a su hija y me encanta su estilo de escritura, me apena enormemente que su estado de ánimo la haya impulsado a abandonar su blog, y espero sinceramente que se reponga cuanto antes y se siga comunicando a través del blog. Mis blogs me han salvado de la depresión donde me encontraba hace un par de años - la disciplina de escribir, de pensar en la próxima entrada...

Les deseo todo lo mejor a Ud y a su familia.

Caroline